Por Trinidad Cragno
En pleno desarrollo de una pandemia que revolucionó al mundo, surgieron diferentes movimientos sociales, uno de ellos fue el auge de la lucha “Black Lives Matter” o “Las vidas negras importan”, un movimiento internacional originado dentro de la comunidad afroestadounidense en contra de la violencia y discrimnacion hacia las personas por su tonalidad de piel. Diferentes artistas se involucraron con el movimiento y fueron partícipes del mismo, entre estos Beyoncé, quien con su arte nos deslumbra.

Para consolidar su sello con Disney+ la cantante lanzó el 31 de Julio un álbum visual llamado “Black Is King” que se puede resumir en la celebración a la belleza de la ascendencia africana. El álbum está basado en el soundtrack del remake de la película de El Rey León (2019) y según la plataforma de streaming trata de “enseñarle a las niñas y niños de hoy, que sigan buscando sus propias coronas”.
Una historia de amor con África
Si bien hubieron críticas sobre la existencia de una supuesta “tipificación” a las personas africanas, hay algo que nos queda en claro: todo proyecto que lanza Beyoncé lo hace desde lo más profundo de su corazón y siempre dejando un mensaje a su público.
En la pieza se refleja la cultura africana en base al relato de un pequeño rey y su historia de vida. Desde los sonidos,maquillaje y actuaciones, logra entrometerse en una nueva experiencia con el continente. Sin embargo, hay un fuerte impacto visual de imágenes más futuristas, modernas y dignas de cualquier producción de la artista. Según comentó en un post en Instagram del 28 de junio, Beyoncé quería "presentar elementos de la historia negra y la tradición africana con un giro moderno y un mensaje universal, y enseñar lo que significa encontrar tu identidad y construir un legado". Y sí que lo logró.

El álbum atravesó fronteras habiéndose filmado en Nueva York, Los Ángeles, Londres, Sudáfrica, África Oeste y Bélgica y contó con la colaboración de diferentes artistas como Lupita Nyong’o, Jay Z, Naomi Campbell, entre otros.

La película cuenta con mensajes profundos pero que pueden ser abordados por todas las edades expresando a su manera una reconstrucción del presente. El fin del film deja una mezcla de emociones y un deseo esperanzador de conocer de dónde venimos y hacia dónde vamos. Como bien dijo la revista Glamour en una nota del 31 de Julio “cuando Beyoncé habla, el mundo escucha” .